El Clásico navideño se tiñó de blaugrana

Los blaugranas hicieron trizas la navidad merengue. Foto: ondacero.es

En la edición #236 de la rivalidad más importante del fútbol español, el equipo culé despachó al cuadro de Zinedine Zidane tres goles a cero en el estadio Santiago Bernabéu, en la vigesimoséptima jornada de la Liga Santander 17/18.

Sergio Ramos y Andrés Iniesta en el sorteo de capitanes, aunado al mediático saludo entre Cristiano Ronaldo y Lionel Messi, eran el preámbulo de la degustación de un gran partido entre los eternos rivales de la península ibérica.

Apenas empezó al rodar el balón sobre el césped, la oncena merengue se encimó a la portería defendida por Ter Stegen, y ya en el segundo minuto de haber comenzado el compromiso Ronaldo anotó tras un cabezazo en el área chica en un cobro de tiro de esquina, pero el tanto fue anulado por posición ilícita del portugués al momento de cabecear, ahogando su grito de gol.

Posteriormente Dani Carvajal probó un disparó a media distancia pero sin peligro para el guardameta alemán, y llegando al minuto 10’ Ronaldo gozó de una clara ocasión de anotar al recibir en bandeja de plata un «pase de la muerte» en todo el centro del área grande pero falló en el disparo y el balón pasó por entre sus piernas.

Luego de media hora de dominio blanco en el campo, el Barcelona creó su primer chance de cara al gol, cuando Messi escorado en su banda contraria metió una habilitación para Paulinho que le ganó en el desmarque a Sergio Ramos y a bote pronto el brasileño remató fuerte con su pierna más hábil, pero Keylor Navas sacó velozmente su mano derecha para enviar la pelota al tiro de esquina.

Como respuesta inmediata apareció otra vez Cristiano, incursionando por el sector izquierdo de la ofensiva madridista, y lográndose meter hasta el área tras tener un duelo contra Sergi Roberto y disparar de zurda al arco, pero Ter Stegen reaccionó con su pierna izquierda para despejar el balón al córner.

Paulinho volvería a exigir a Navas con un cabezazo, luego de una triangulación entre Jordi Alba, Andrés Iniesta y Lionel Messi por la franja izquierda y recibir un centro del astro argentino. El Madrid no tardaría en responderle a los culés, cuando Marcelo le tiró un centro preciso a la cabeza de Karim Benzema, pero el francés atinó la pelota al palo tras anticiparse a Vermaelen.

Los primeros 45 minutos fueron intensos, con los merengues dominando desde el arranque, no obstante, los dirigidos por Valverde emparejaron la posesión del balón al culminar el primer tiempo.

El segundo período inició frenético para el cuadro catalán, ya en el minuto 52’ Luis Suárez aparecería por primera vez en el partido al rematar un pase servido de Jordi Alba pero el portero costarricense respondió rápido a la circunstancia para mantener el cero en su arco.

Pero el delantero uruguayo no perdonaría al minuto siguiente en una jugada que tuvo inicio en los pies de Sergio Busquets quien conectó con Ivan Rákitic, y el croata posteriormente se paseó por todo el centro del mediocampo madridista hasta llegar a ¾ de cancha y habilitar a Sergi Roberto y éste último le sirvió el balón a Suárez para que batiera a Navas con la contemplación de la pasiva defensa merengue.

Al minuto 62’ la conexión Messi-Suárez volvió a causar estragos, cuando el «9» del Barcelona aprovechó una habilitación del mediocampista argentino, pero Navas tapó en primera instancia, el rebote le quedó a Messi quien le devolvió el balón a Suárez y éste remató al palo, momento en que apareció Paulinho para empujar la pelota de cabeza con la portería desguarnecida, pero en última instancia Carvajal despejó ilícitamente la esférica con su mano derecha, ganándose la tarjeta roja directa sin ofrecer reclamos al árbitro principal y originando un penal a favor de los visitantes.

Lionel Messi parado en el punto penal, no falló ante Keylor y lo batió pese a que el tico adivinó la intención del argentino quien llegó a la cifra de 15 tantos en la historia del Clásico, liderando la tabla de los máximos goleadores en solitario de la rivalidad Madrid-Barcelona.

Con un jugador menos y el marcador en contra las esperanzas se les reducían al cuadro merengue, momento en que Zidane le dio ingreso a Gareth Bale para buscarle solución al partido.

Faltando 20 minutos para el final, Messi tuvo el chance de anotar el tercer gol en un mano a mano frente a Navas y con la sombra de Sergio Ramos, pero el guardameta tico le dijo que no ésta vez al argentino.

Bale tendría su primera oportunidad para descontar en el marcador al 78’, tras una filtración de Luka Modric en el área culé quien le propinó un «el pase la muerte» para el galés que sólo frente a Ter Stegen no pudo vencerlo y estrelló su remate al cuerpo del portero. Un minuto después volvió a intentarlo Bale, ésta vez desde fuera del área, con un disparo potente a media distancia que atenazó en dos tiempos el guardameta visitante.

El Madrid seguía encimando en busca de recordar distancia en la pizarra, generando incesante peligro en el área catalán pero sin lograr acabar con la resistencia blaugrana, Ramos gozaría de dos oportunidades casi sucesivas, tras aprovechar en primera instancia un balón servido dentro del área contraria y rematar «a boca de jarro» pero Ter Stegen puso el pecho a las balas y despejó la pelota al córner, y en la jugada siguiente no llegó a definir una habilitación de Cristiano Ronaldo, pese a su barrida para llegarle el balón no fue suficiente para empujarlo al fondo de la red.

Con el tiempo casi expirado y los aficionados abandonando al Santiago Bernabéu, el Barcelona colocaría la estocada final con una incursión de Messi por la banda derecha, llegando a la línea de fondo y sirviendo un pase atrás para la aparición de Aleix Vidal quien remató sin clemencia a la portería y venciendo a la pobre resistencia de Navas que se le coló la pelota por debajo del cuerpo.

Como ya es costumbre, se han hecho repetitivas las goleadas hechas por el Barcelona en la casa del Real Madrid, desde el concierto de fútbol de Ronaldinho (Real Madrid 0-3 FC Barcelona 2005), pasando por el derroche de magia de la era Guardiola (Real Madrid 2-6 FC Barcelona 2009), y el último antecedente con la ovación a Andrés Iniesta (Real Madrid 0-4 FC Barcelona 2015).

Con esta victoria, Valverde y su equipo descansarán tranquilos en estos días decembrinos hasta enero, con una ventaja de 9 puntos sobre su más cercano seguidor: Atlético de Madrid; mientras que asciende a 11 unidades con respecto al Valencia CF que marcha de tercero y 14 en relación a su archirrival: Real Madrid.

Pedro Castillo

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